domingo, 13 de mayo de 2012

EL GRAFENO

El grafeno es un material transparente, flexible, extraordinariamente resistente, impermeable, abundante, económico y conduce la electricidad mejor que ningún otro metal conocido.Aunque fue sintetizado por primera vez en 2004, saltó a la fama en 2010 cuando sus descubridores, los investigadores de origen ruso Andre  Gein y Konstantin Novoselov recibieron el premio Novel de la Física.Como ya apuntó entonces Andre Geim, las aplicaciones potenciales del grafeno son tantas que ni siquiera eran capaces de enumerarlas.
Este material permitirá fabricar desde dispositivos electrónicos con pantallas flexibles y transparentes y baterías ultrarrapidas a potentes paneles solares, sin olvidar aplicaciones en aeronáutica, medicina y otros sectores que se investigan en la actualidad. Además, supone una base excelente para crear  nuevos materiales a medida, en función de las necesidades específicas. 

miércoles, 14 de marzo de 2012

EL EXPENDEDOR DE VINO

 El sistema  fue diseñado por Herón. El vino era servido desde un recipiente a que se comunicaba con otro recipiente c por medio de un vaso comunicante. De forma que cuando se cogía vino de a el nivel de c bajaba y el flotador d abría la válvula. Entonces el vino caía dentro de c procedente de un gran depósito e hasta que la altura de a y c hacía que el flotador volviera a tapar la válvula.

LAS PUERTAS DE HERON

Las puertas se abrían solas y cuando entrabas se escuchaba música celestial. Una vez dentro, en uno de los altares, podías ver una esfera luminosa levitando como por arte de magia y en otro altar podías contemplar con tus propios ojos como los dioses danzaban a su alrededor.

lunes, 12 de marzo de 2012

EL TORNILLO DE ARQUIMEDES

El tornillo de Arquímedes consiste simplemente en un enorme tirabuzón que gira accionado por una manivela situada en su parte superior. A veces, en lugar de la manivela, se colocaba directamente un molino, de manera tal que se utilizara la fuerza del viento para hacerlo funcionar.
El extremo inferior debe encontrarse sumergido en aquello que se desea levantar, generalmente agua, de modo tal que el tirabuzón quede inclinado con respecto a la superficie de lo que se desea elevar. Mientras el tirabuzón gira por acción de la manivela o del molino, una pequeña cantidad de agua queda atrapada dentro. La inclinación del tornillo debe ser tal que parte del giro introduzca agua dentro del tirabuzón, y parte introduzca aire, el siguiente giro permitirá que más agua ingrese en él, y a su vez impedirá la salida de la que anteriormente había entrado. Cada porción de líquido queda atrapada en una sección del cilindro o tirabuzón que al girar la arrastra hacia arriba. De este modo, luego de sucesivos giros, el agua asciende poco a poco dentro del tornillo. Dado que el objetivo era elevar el agua a una determinada altura, se solía usar más de un tornillo en serie, debido a las limitaciones de la máquina. Así, el agua iba ascendiendo en etapas.

LA GARRA DE ARQUIMEDES

Durante el ataque romano a Siracusa, Arquímedes se puso a trabajar de manera inmediata en la defensa de su ciudad. Y diseño la garra de Arquímedes también conocida como el agitador de barcos, la garra consistía en un brazo semejante a una grúa de donde estaba suspendido un enorme gancho de metal. Cuando la garra era soltada sobre un barco enemigo, el brazo se movería en forma ascendente, levantando el barco fuera del agua y posiblemente haciéndolo hundir.

EL PRINCIPIO DE ARQUIMEDES

El principio de arquímedes es un principio físico que afirma que: Un cuerpo total o parcialmente sumergido en un fluido en reposo, recibe un empuje de abajo hacia arriba igual al peso del volumen del fluido que desaloja. Esta fuerza recibe el nombre de empuje hidrostático o de Arquímedes y se mide en newtons. El principio de Arquímedes se formula así:
E = M*G = PF G V

LA CORONA DORADA

 Vitruvio, Herón ll ordenó la fabricación de una nueva corona con forma de corona triunfal, y le pidió a Arquímedes determinar si la corona estaba hecha sólo de oro o si, por el contrario, le había agregado plata en su realización. Arquímedes tenía que resolver el problema sin dañar la corona, así que no podía fundirla y convertirla en un cuerpo regular para calcular su masa y volumen, a partir de ahí, su densidad. Mientras tomaba un baño, notó que el nivel de agua subía en la bañera cuando entraba, y así se dio cuenta de que ese efecto podría ser usado para determinar el volumen de la corona. Debido a que el agua no se puede comprimir, la corona, al ser sumergida, desplazaría una cantidad de agua igual a su propio volumen. Al dividir el peso de la corona por el volumen de agua desplazada se podría obtener la densidad de la corona. La densidad de la corona sería menor que la densidad del oro si otros metales menos densos le hubieran sido añadidos.